En esta ocasión vamos a preparar la mejor receta de pimientos verdes rellenos.
Los pimientos son unas hortalizas, originarias de América del Norte, Sudamérica, México y Centroamérica. Existe una gran variedad de ellos y se pueden cocinar de diversas formas. Además, tienen una gran cantidad de vitaminas, minerales y un alto poder antioxidante. Por otra parte, gracias a la fibra que contienen, tienen un efecto saciante.
Vamos con la receta. Las rellenaremos de tortilla de patatas. Una mezcla deliciosa.
Mejor receta de pimientos verdes rellenos
Ingredientes (para dos personas)
- Dos patatas
- Un par de pimientos verdes (italianos)
- Aceite de oliva virgen extra
- Cuatro huevos
- Media cebolla
- Sal
- Salsa de tomate (como acompañamiento)
Elaboración
Primero, le retiramos el rabo a los pimientos verdes y los limpiamos bien por dentro, quitándoles las semillas. Los reservamos.
A continuación, pelamos las patatas, las troceamos y las ponemos a freír en una sartén, con abundante aceite caliente. Después, agregamos la cebolla picada y cocinamos con fuego alto, removiendo de vez en cuando.
Tapamos parcialmente. Cuanto esté listo, lo añadimos a un colador, para eliminar el exceso de grasa y reservamos en un bol. Sazonamos.
Seguidamente, cascamos los huevos, los agregamos al bol con las patatas, rompiéndolos. Probamos que tal está la mezcla de sal y, si es preciso, rectificamos.
Vertimos la mezcla en una sartén con un poco de aceite y dejamos que cuaje durante unos segundos. Después, retiramos todo a un bol y removemos bien.
Rellenamos los pimientos con la tortilla, agitando mientras la vamos incorporando para que llegue bien hasta el fondo. Podemos hacerlo ayudándonos con una manga pastelera o cogiendo pequeñas porciones con una cuchara. Tapamos con las tapas que hemos reservado previamente.
Ahora tenemos dos alternativas para cocinar los pimientos verdes rellenos. Al horno o en la sartén. La mejor opción es la primera ya que en la sartén existe el riesgo de que se nos salga el relleno (pero hay un truco para evitarlo que veremos a continuación).
Vamos a ver las 2:
En la sartén
Veamos primero el truco para que el relleno no se salga: tenemos que hacer una especie de masilla mezclando agua, sal y harina. Justo antes de ir a meter los pimientos a la sartén, untamos la parte por donde los hemos rellenado con esta masilla que hemos preparado. A continuación, los metemos rápidamente. Así lograremos que el relleno se quede dentro. Los freímos a fuego medio-suave con un poco de aceite y dejamos que cuaje durante unos segundos.
La masilla quedará crujiente, pero si no la queremos, podremos quitarla con facilidad.
En el horno
Introducimos los pimientos en un recipiente adecuado para horno a 180ºC durante unos 12 minutos o hasta que veamos que los pimientos se han asado.
Los sacamos, poniéndolos encima de un papel de cocina para absorber el aceite y, si queremos, podemos cortarlos en rodajas.
Ya los tenemos.
Ahora a disfrutarlos.
Como sugerencia, podemos acompañarlos con salsa de tomate caliente.
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