jariam marzo 31, 2019

La verdad es que no hay como las conservas caseras. En esta ocasión vamos a hacer un tomate frito thermomix que además podremos conservar en tarros de cristal para utilizar durante mucho tiempo para nuestros guisos y platos.

Vamos a ver cómo hacerlo en nuestro robot de cocina.

Tomate frito thermomix

tomate frito thermomix

Ingredientes

  • 2 dientes de ajo
  • medio cubilete de aceite de oliva
  • 100 gramos de cebolla
  • 30 gramos de azúcar
  • Un kilo y medio de tomates maduros
  • Una pizca de sal y otra de pimienta

Ingredientes opcionales: 

  • Albahaca fresca
  • Cien gramos de zanahoria

Elaboración

En primer lugar, vamos a triturar los tomates. Para ello, los lavamos bien, les hacemos un pequeño corte en la parte superior y los exprimimos, haciendo fuerza con las manos. Lo que queremos es eliminar la mayor parte del líquido que llevan dentro.

Seguidamente, colocamos los tomates en el vaso de nuestra thermomix y programamos con velocidad 6-7; hasta que veamos que han quedado bien triturados, con una textura como de puré. Retiramos y reservamos.

Otra alternativa: Si queremos aligerar el proceso, podemos utilizar tomate natural triturado. En ese caso bastaría con un kilogramo, en lugar del kilo y medio necesario haciéndolo de la otra forma.

Lo siguiente que tendremos que hacer es calentar el aceite. Para eso, colocamos el aceite en el vaso limpio y programamos por 3 minutos, velocidad 1, en modo varoma.

Después, colocamos dentro los dientes de ajo junto a la cebolla troceada (y a la zanahoria, si es que hemos decidido incorporar este ingrediente opcional) y hacemos un sofrito con estos ingredientes. Para esto, primero programamos en velocidad 5 durante 10 segundos y seguidamente 7 minutos con temperatura varoma y velocidad de 3 1/2.

Cuando la thermomix termine su tarea, bajamos los restos del vaso ayudándonos de la espátula y entonces añadimos el tomate junto al resto de ingredientes.

Programamos de nuevo durante 30 minutos, manteniendo la temperatura varoma y la velocidad 1. Las salpicaduras son casi inevitables durante esta parte del proceso así que será mejor colocar el cestillo encima de la tapa.

Si hemos decidido añadir las hojas de albahaca, las colocamos cuando queden 5 minutos para terminar la salsa.

Y ya la tenemos. Ahora podemos conservarla en un envase hermético de vidrio, congelarla y sacarla cuando la necesitemos para nuestros platos. Es un ingrediente que va con muchísimos de ellos. Por ejemplo con el arroz a la cubana. 

 

 

 

Deja un comentario.

Tu dirección de correo electrónico no será visible. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies