Vamos a hacer un pastel de salmón con pan de molde. Una sencilla y deliciosa receta.
Pastel de salmón y pan de molde
Ingredientes para un molde tipo «cake»
- 200 gramos de salmón ahumado en lonchas (hay que procurar que sea tierno y jugoso, sobre todo el que sea para forrar el molde. Ya que si no se nos hará más trabajoso cortar las rebanadas a la hora de servir)
- Doscientos gramos de lata de carne de cangrejo o un paquete de sucedáneo de marisco en palitos (16)
- Una lata de pimientos rojos
- Un bol de mayonesa
- Rebanadas de pan de molde blanco o integral sin corteza
Para decorar:
- Alcaparras
- Huevo duro
- Pepinillos
- Cualquier otra cosa que se os ocurra
Elaboración
Primero, forramos el molde (tipo cake alargado y hondo) con lonchas de salmón. Debemos procurar usar las que estén más enteras y tengan una mejor presentación.
En el caso de que el salmón sea graso, no hará falta engrasar el molde ya que se desmoldará por sí solo con facilidad.
Una vez que ya lo tengamos forrado por todos lados, ponemos un poco de mayonesa y una capa de rebanadas de pan en el fondo. Debemos cortarlas a la medida para que cubran bien la superficie. Presionamos con las manos para que se adhieran bien.
Después de haber forrado el molde, picamos muy menudito el salmón que nos ha sobrado junto al cangrejo (o los palos de surimi) y el pimiento rojo.
Seguidamente, mezclamos con la mayonesa y cubrimos las rebanadas de pan con la mezcla. Ponemos una capa generosa y cubrimos de nuevo con pan. Seguimos haciéndolo sucesivamente, hasta que terminemos con él, presionando siempre el pan con las manos para que se compacte.
Una vez hecho esto, doblamos los sobrantes de salmón hacia adentro y ponemos algo pesado (como un brik de leche) encima para que todo quede bien prensado. A continuación, lo metemos en la nevera.
Es recomendable dejarlo allí durante varias horas (mejor si es de un día para otro). El pastel debe de estar frío para que todo quede bien compactado y sea más fácil cortarlos cuando vayamos a servirlos.
Cuando desmoldemos el pastel, ya podemos decorarlo con lo que se nos ocurra (alcaparras, eneldo, pepinillos, huevo duro…)
Es hora de sentarse a disfrutarlo. Buen provecho.
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