Hace poco, jugando con los pequeños de la casa, inventábamos historias con sus lego dinosaurius en los que habían combates, huidas, la llegada del asteroide, sus migraciones, sus amistades, etc., hasta que surgió la pregunta, “Papá, ¿Qué comían los dinosaurios?” y, para esquivar lo cruento, nos pusimos a investigar, ya que entre la suposición, la historia y lo que se ve en las películas, tenemos una visión muy generalizada.
Pero la alimentación de los dinosaurios era variada, constante, según su tamaño y especie. Más se podría creer que todo era carne y en especial por la difícil vida que tendría e hombre de las cavernas, que de plano convivió poco o casi nada con ellos ya que las especies surgieron en distintas eras y zonas.
Así que, leyendo, llegamos a obtener esta información inicial que a bien compartimos con ustedes.
¿Qué comían los dinosaurios?
Los herbívoros
En principio, los brontosaurios y mastodontes pertenecían a esta especie. De hecho, por la alimentación del elefante que es descendiente del segundo, se puede intuir.
Además, el descubrir que estas especies poseían los dientes planos ha fomentado la sospecha en los paleontólogos, debido a que este tipo de dientes podía moler con facilidad hojas, frutos, flores, ramas y cortezas.
Por ello, el masticar la carne de otras especies de la época les hubiere sido más difícil y el sólo “sorberlos” no les habría brindado los nutrientes debidos.
Esto último no implica que no pudieran atreverse a comerla, más no se puede saber a ciencia cierta de cuáles otras especies podían hacerlo, además, las fuertes nevadas o lluvias o erupciones en pena estabilización del planeta obligaban a migraciones donde conseguir plantas en altas cantidades era dificultoso.
De allí se extrae qué comían los dinosaurios herbívoros: Mayoritariamente plantas, pero las situaciones extremas les obligaban a probar las carnes de animales más chicos –podría ser hasta de sus crías-, además de grandes cantidades de agua para mantener su estabilidad corporal.
Qué comían los dinosaurios carnívoros
Tanto el Tiranosaurius Rex como el Tigre Colmillos de Sable o el mismo Pterodáctilo pueden considerarse carnívoros por igual, con distintas maneras de alimentarse.
El primero obtenía “la carne fresca”, de animales de su mismo tamaño o pequeños que podía acorralar, aunque una manera de defensa de los reptiles más pequeños era el poder detectar el área donde el T-Rex se encontraba gracias a sus deposiciones y micciones, lo que es alertaba de dónde no debían estar.
Ya que el Tiranosaurio no podía tomar a ningún animal con sus cortas manos, debía come in situ la carne de sus presas. Tampoco habitaba en manada salvo para la reproducción, así que los paleontólogos han descrito que la hembra de la especie realizaba los mismos procedimientos que el macho y cada uno veía por sí mismo.
El Tigre Colmillos de Sable pertenece a la era de los dinosaurios y por ende se debe hablar de él. Era un felino y por naturaleza, un cazador al cual no le importaba el tamaño del rival, sólo su sabor.
Y con las carnes recabadas alimentaba a manadas, lo que daba a entender que la cacería no duraba mucho y al terminar su digestión, el ciclo continuaba.
¿Qué comían los dinosaurios voladores como el Pterodáctilo?, ya siendo adultos se alimentaban de árboles y frutos altos, lo que le hacía entrar en franca competencia con los brontosaurios.
Además, para alimentar a sus crías, todo ser pequeño en movimiento, era cazado en vuelo rapaz y llevado a las fauces de sus polluelos, sin importar de qué estuvieren hechos, así que la carne era lo primero más no lo único en saborear.
Otras cosas
Los paleontólogos han encontrado coprolitos que no son más que las deposiciones petrificadas que dan a entender qué comían los dinosaurios, pudiendo probar cualquier cosa que sus dientes pudiesen tratar y que el ácido de sus estómagos pudiese reventar, incluso huesos, tierra, piedras.
Pero la distancia entre dichos coprolitos y los fósiles encontrados, han dificultado el saber de qué animal específicamente surgió, acrecentando el misterio de qué comían los dinosaurios, tipo por tipo, especie por especie.
En realidad, lo de herbívoros y carnívoros es la mejor manera de correlacionarlos, intuyendo que las migraciones, sequías y necesidades les hacían mover su alimentación de manera intuitiva, ya que la inteligencia no era su virtud, salvo quizás el Velociraptor, que poseía la capacidad cerebral más acorde a su tamaño y sabía evadir a los carnívoros y aprovecharse de lo que se caía de las fauces de los herbívoros para de ello, comer.
