Los alimentos precocinados son los que ya están cocinados y se venden envasados. Algunos de estos productos son las pizzas, las lasañas o empanadillas que puedes encontrar en cualquier supermercado o establecimiento. Pero vamos a ver más específicamente lo que son.
¿Qué son los alimentos precocinados?
Son los que están envasados y no requieren mucha preparación. Esto, de entrada, ya es una gran ventaja, ya que nos ahorra mucho tiempo. Hay muchas veces en las que las obligaciones no te dejan tomarte el tiempo necesario para cocinar un plato con calma. Cada vez son más los productos que podemos encontrar precocinados. Por ejemplo: legumbres, pastas o arroces.
También hay varios tipos de platos precocinados. Vamos a ver cuáles:
Tipos de alimentos precocinados
Congelados
Son los más habituales y los que más abundan. Pueden encontrarse muchos de este tipo: verduras, preparados para cocidos o arroces, pastas y más.
Estos platos generalmente ya están elaborados y lo único que tienes que hacer con ellos es descongelarlos y calentarlos después.
En sobre
Las más comunes en esta categoría son las sopas, los purés y hasta las salsas. Generalmente basta con prepararlos con agua.
Envasados al vacío
Basta con calentarlos y también hay mucho donde elegir: tortillas, pollos de supermercado o incluso los jamones y embutidos envasados.
En conserva
Estos no necesitan mantenerse en frío y perduran durante bastante tiempo. Normalmente están en botes de cristal o latas. Para consumirlos solamente necesitas calentarlos. También hay mucha variedad: lentejas, tomate, fabadas etcétera.
Platos precocinados saludables
Hay quién todavía siente recelo a la hora de comer estos productos, ya que piensan que tal vez no sean demasiado saludables. Pero no tiene por qué ser así, hay otras opciones. Veamos algún ejemplo:
Conservas de verduras al natural
Pocas cosas hay más saludables que las verduras. La gama es muy amplia, tanto en variedad de hortalizas y verduras como en calidades y marcas. Entre ellas, mezclas, como menestras o macedonias o alcachofas, pimientos, judías verdes, acelgas, espinacas o habitas.
Estos alimentos son cocinados y conservados de forma natural, en agua. A lo sumo se le agrega algo de sal o algún antioxidante o conservante. Pero esto último también puede evitarse. Basta con leer la etiqueta y buscar los que no lleven ningún añadido.
Verduras asadas
Aunque están disponibles en aceite, también pueden elegirse asadas y conservadas al natural. Si optas por esta última opción puedes aliñarla después a tu gusto, con un aceite de tu elección.
Las verduras más comunes en esta categoría son los pimientos (morrones o del piquillo), las cebollas, berenjenas o tomates.
Hay mucho más. Por ejemplo, las sopas deshidratadas, las legumbres cocidas, conservas (y semiconservas) de pescado, pollos asados, guisos y un largo etcétera.
Ventajas de los alimentos precocinados
Sabor
Son platos muy sabrosos, esto hace que tengan una gran aceptación entre un sector del público, especialmente del joven. Esta potencia del sabor llena de matices es debida a la sal y a los conservantes artificiales que suelen llevar. Y no solamente esto, ya que, como habrás visto un poco más arriba, hay platos precocinados que están hechos de forma natural
Variedad
Las empresas de alimentación cada vez son más conscientes de que debido al acelerado ritmo de vida que muchas veces llevamos son bastantes las veces en las que recurrimos a los precocinados. Por eso, cada vez hay mucha más variedad. Ya se encuentra casi de todo: purés, platos de cuchara, arroz, empanadillas…
Rapidez
Bien es sabido que «el tiempo es oro», sobre todo cuando este apremia. A veces nos encontramos en esta situación: tenemos poco tiempo, pero no queremos renunciar a disfrutar de un buen plato. Este es uno de los mayores factores de éxito de la comida precocinada: lo poco que se tarda en prepararla, (muchas veces basta con unos minutos de microondas). También se gana en tiempo de limpieza, ya que normalmente se ensucia solo el plato donde se come y poco más.
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